Cita de la semana (5)

«En la Ciudad del Vaticano hay dos Papas por kilómetro cuadrado.»

Vía Educared

Haciendo casi deporte

Hoy casi he ido al gimnasio. Y digo casi porque he llegado hasta 2 metros antes de la entrada, con la ropa de deporte ya puesta y mi mochila en la que llevaba la ropa para cambiarme, una botella de plástico con agua y.... mierda! se me ha olvidado la toalla.

Hacer deporte, con lo que yo sudo, sin toalla es una guarrada. Y después, claro, me quería duchar y pasar un rato por la sauna.

Así que me he vuelto a casa, en principio con la intención de coger una toalla y volver. Y como suele ocurrir en esas ocasiones, me ha entrado la pereza para volver al gimnasio (y eso que no vivo tan lejos).


Pero no lo he dejado ahí. Encendí el ordenador, abrí una página con música para workout que me paso WildSnake (gracias neng!), aparte las cosas del centro de mi habitación... y me he puesto a hacer unas cuantas flexiones, abdominales, y algunos ejercicios de Thai-bo por mi cuenta.



A lo tonto he estado unos 40 minutos, lo cual no está nada mal teniendo en cuenta que podía en cualquier momento dejarlo y tumbarme en el sofá que tenía al lado. No es como ir al gimnasio, pero mejor que tirarse en el sofá o sentarse delante del ordenador..

De concierto...

¡Anoche estuve en un concierto de Dieter Thomas Kuhn!

¡Ah! Pero, ¿no sabéis quien es?

Para los que están en Alemania, es el autor de canciones tan conocidas como: Eine neue Liebe ist wie ein neues Leben o Ich war noch niemals in New York.

Para los de "fuera", Dieter viene a ser como el Georgi Dan alemán.

Ah! Pero, ¿no sabeis quien es Georgi Dan? (hasta ayer creía imposible que alguien no supiera quien era, pero uno nunca acaba de sorprenderse). Se trata de el rey de la canción del verano, con hits tan famosos como la barbacoa, el negro no puede, el chiringuito, etc.

Pues Dieter Thomas Kuhn se parece mucho a el, tanto en el estilo y letra de sus canciones, como en ser uno de los personajes que han conseguido hacer de lo cutre y hortera un estandarte. Nunca se sabrá si realmente son así o es una pose, pero realmente es la imagen que venden.

Lo cierto es que Dieter es un auténtico clásico que conocen hasta los estudiantes de Erasmus. Entre otras porque aprenderse sus canciones es una manera bastante fácil de socializar, ya que son las típicas que cantan los alemanes cuando se emborrachan. Además como tienen textos relativamente sencillos (básicos), son aptos para cualquiera que se inicie al idioma.
Yo puedo decir que he aprendido mucho vocabulario con sus canciones.

En fin, a lo que íbamos: el concierto.

Nada más llegar vimos que nos habíamos equivocado de vestimenta. La gente se había preparado para la ocasión: trajes multicolores, flores y look hippy años 70 (desgraciadamente las fotos y los vídeos han salido fatal, pero puede que cuelgue alguno en otro momento).

Y ellos no defraudaron con su atuendo. No fue exactamente como en esta foto, pero casi.
Eso si, lo mejor los peinados (son reales, nada de pelucas!)

Dieter Thomas Kuhn y su Kapelle

Cantaron clásicos como Michaela, Griechicher Wein, Fremde ohne Freunde o Fiesta Mexicana. Aunque también reversionaron a otros autures/as como Rafaella Carra con su Tanze Samba mit mir vs. Explota

Hay que reconocer que en el concierto lo dieron todo, y el público no se quedó atrás. El tío es un auténtico showman y la introducción/historia a cada una de las canciones era casi tan divertida como la propia letra. Vamos, todo un éxito (sobre todo entre las mujeres).
Nos lo pasamos muy bien.


p.d.
¿Que cuál es mi canción preferida? Pues "Frau Sommer"
Os traduzco un par de estrofas:

"Yo tenía 16 años, y ella 31
y sobre amor yo no sabía mucho.
Ella lo sabía todo, y me hizo sentir
que ya no era un niño"

Y hasta aquí puedo leer...

Plan espontáneo

La verdad es que molan los planes espontáneos.

El miércoles pasado estábamos, como siempre, comiendo los del curro en la cantina. Y hablando, entre otras cosas, sobre la última vez que habíamos ido a esquiar. Y como otras tantas veces estábamos comentado: "hay que repetirlo algún día", "si, es cierto, algún día de estos tenemos que mirarlo", "porque no queda tan lejos", "si, claro, en un día, ir y volver no se tarda tanto"...

Hasta que uno soltó: "¿Oye, y por qué no vamos mañana?"

Y fue dicho y hecho. En cinco minutos habíamos elegido lugar (Christlum, una estación relativamente pequeña, pero a sólo 1 hora y media de camino, en la frontera con Austria), miramos la previsión del tiempo (buena) y miramos el tema disponibilidad... no estaba nuestro jefe, así que decidimos por unanimidad tomarnos el jueves libre.

Por lo que al día siguiente por la mañana cogimos los bártulos y nos montamos en el coche....
y a los Alpes!

Al salir de casa ví que había una mini-capa de nieve y me estuve acordando de la familia del que había hecho la previsión del tiempo... pense: "si aquí está nevando, la que nos va a caer en los Alpes...".

Pero no, de hecho nada mas pasar Munich se fue despejando poco a poco... y en cuanto avistamos las montañas el cielo estaba totalmente despejado. Azul azulísimo.


Llegamos, nos subimos al telesilla... y la pista prácticamente toooooooooooda para nosotros. Es que, ¿quien va esquiar un jueves?.

Sol, pistas enormes y vacías... ¿qué más se puede pedir? La única pena fue que la nieve estaba bastante dura, sobre todo en las zonas donde daba sombra (tengo un par de moratones que lo confirman).

Encontramos a un grupo que estaba entrenando, haciendo slalom, (con banderillas) y nos pusimos nosotros también a hacer lo mismo, en plan profesional (desgraciadamente no nos cronometraron), hasta que nos dijeron que esa pista era sólo para entrenamiento, y nos tuvimos que ir a otra.

Y cuando estábamos en la pista más alta de la montaña, uno del grupo dijo: "¿Oye, y si escalamos hasta la cima?". Yo pensaba que andaban de coña, pero no. Se pusieron los esquíes al hombro... y a subir. Yo los seguí claro, no me iba a quedar solo (podía aparecer el abominable hombre de las nieves en cualquier momento).

En fin, que unos 40 minutos después, sin resuello y con medio pulmón perdido por el camino llegamos a la parte superior de la montaña. Allí nos sacamos un par de fotitos (la verdad es que la vista era increible, sobre todo porque la visibilidad era muy buena), nos pusimos los esquies... y p'abajo! Sólo 5 minutos en deshacer lo que tanto esfuerzo nos había costado subir...


Ya destrozados, hicimos un descansito.


Y de vuelta pa'casa. La última bajada eramos literalmente los únicos que había en la pista.

Lo dicho, molan los planes espontáneos.

Cita de la semana (4)

«It turns out, you can´t take responsibility for someone else´s happiness.»

Vía xkcd

Adiós a la fotografía "analógica"...

Tengo una mala noticia para Gisuka: van a dejar de fabricar las Polaroid!


Así que, aunque parece que todavía vas a tener carretes por una temporada, te recomendaría que no los gastes con tanta alegría :)

Y es que de alguna manera, desde el surgimiento de la era digital, las polaroid ya había perdido la gracia de mirar al instante "a ver cómo ha salido la foto".

Es increíble lo rápido que ha avanzado este mundo de la fotografía digital. No hace tantos años estábamos tan acostumbrados a comprar carretes, dónde el dilema era el siguiente: "¿Compro uno de 24 o de 36? Bah, mejor del de 24, que seguro que no hago tantas fotos..."

Y lo cierto es que tenia cierta gracia eso de ir a la tienda de fotos y ver cómo habían salido. O esa fascinación cuasi-esotérica al ver que de la nada apareciese poco a poco la imagen sobre el fondo blanco (aprendí a revelar carretes en blanco y negro en un estudio).

Mi primera "cámara digital" fue una "todo en uno". A saber: cámara-webcam-video, con una magnífica resolución de 360x480 pixels. Usaba dos pilas AA que se gastaban a las 24 fotos (vamos, que había que cambiarla tan a menudo de pilas como las otras de carrete). Tenía la opción de sacar fotos sin pilas si lo conectabas el puerto USB, pero no era muy operativo que digamos.

Aunque por aquel entonces todavía usaba mi cámara normal, así como una nueva tecnología revolucionaria llamada APS, que iba a cambiar el concepto de cámaras tradicionales, con tres formatos: panorámico, gran angular y normal. ¿Alguien se acuerda de ellas? Yo si, porque debí ser uno de los pocos pardillos que se compro una.

Porque al poco tiempo fue cuando explotó el mercado de las digitales "pofesionales, mu pofesionales". Me compre la primera compacta allá por el 2003, una Canon Ixus V3, cámara que aún guardo con mucho cariño.


Aunque hoy en día hasta las compactas se han hecho demasiado "grandes" para llevar a todas partes.

Mi actual cámara es una Cybershoot k550i , aunque me da que muy pronto voy a tener otra...

¿tal vez una N73?

Uff, así a botepronto diría que he tenido en mi vida unas 11 cámaras...

Cita de la semana (3)

«No temas al enemigo que te crees al decir no, ni te fíes del amigo que te haces al decir si.»

Vía el libro Cartas de un comerciante a su hijo - Graham «el Basilisco»
Gracias a Guti por dejarme y recomendarme el libro.

¿Dónde está el truco?

¿Os han hecho alguna vez alguna propuesta que no podíais rechazar?

Del estilo:

"Te viene Angelina Jolie (o Brad Pitt, que cada cual se aplique la persona que le apetezca más) y te dice que tienes dos opciones:
-Pasar la noche durmiendo en una cuadra de cerdos
-Pasar la noche (que no durmiendo) con ella (el) en una suite del Hilton

¿Con cual te quedarías?"

Vamos, es que no hay color!

Si no fuera por el pequeño detalle de que en ese momento tienes tienes novia/o y estás comprometido/a.

(afortunadamente o no, ya no es mi situación actual).

Pues a veces en el mundo de la empresa a veces ocurren este tipo de situaciones, sobre todo en épocas de cambios/reestructuración.

Imaginaros que os llega un nuevo jefe y os dice que os olvidéis de lo que habéis estado haciendo hasta ahora porque las cosas han cambiado (nueva organización, estrategia, etc.). Eso si, tiene dos puestos libres entre los que puedes elegir:

-Te puedes quedar haciendo un trabajo similar al de hasta ahora, pero cada vez con menos responsabilidad, proyectos, perspectivas y mayor aislamiento con respecto al resto del grupo.

-O puedes escoger llevar un proyecto innovador, donde tendrás libertad de acción, presupuesto, recursos tanto materiales como humanos a tu disposición, estatus de project manager y nuevo contrato (con posibilidad de mejora).

Bueno, con muchos detalles todavía por aclarar, pero básicamente esto lo que me han ofrecido hoy. ¿Y dónde está el truco? La verdad es que todavía lo estoy buscando.

Al principio pensaba que el truco estaba en que tenía que cambiar de lugar de trabajo, ya que el proyecto se va a llevar en Regensburg (Ratisbona). ¿Y me supone esto un problema? Hombre, desde luego no es lo ideal. Se tarda 1 hora y cuarto en coche, con trafico normal (entre semana). A largo plazo no es planteable, aunque supongo que al principio si que lo haría. Luego tendría que mirar alternativas...

¿Conocéis a alguien que alquile alguna habitación entre semana?

Aunque para mi el truco realmente está en otro lado, aunque esto no lo sabe mi jefe. Y es que ya tengo otros planes. El proyecto es a 2-3 años y estoy seguro que no voy a estar aquí tanto tiempo. De hecho, se al 99,9% que el año que viene no voy a estar aquí.

Hace 2 años esta oferta me hubiera hecho saltar de alegría. Ahora me da pena un poco porque no cuadra con mi situación personal / profesional a medio plazo.

Entonces, ¿que es lo que he decidido? Aceptar el reto, por supuesto.
¿Que me voy antes y no termino el proyecto? Bueno, pues que me quiten lo bailao!
Algo aprenderé, seguro.

p.d.
Aplicando esta teoría al caso explicado al principio... esta claro que elección tomaría, ¿no?. Vamos, es que... no hay alternativa! O queréis que pase la noche en una cuadra de cerdos? Yo creo que cualquier novio/novia entendería que se trata de una excepción.... ¿o no?
:p

¿Dinero seguro?

El mercado está loco. Hace dos semanas se produjeron dos records en el IBEX 35: el de la mayor bajada de su historia (-7,46%), y el de la mayor subida de su historia (6,95%).

Los que ese lunes veían un "crash" y hecatombe mundial, el miércoles siguiente estaban eufóricos y no paraban de comprar (a precios baratos, decían). Pero no hay que llevarse a engaños: desde el verano la tendencia en las bolsas mundiales (salvo un par de rebotes) es claramente bajista. Y la alta volatilidad de estos días no es precisamente amiga de inversores inexpertos.

Recomendación de la semana:

Por lo tanto, ¿que hacer con el dinero? Para los que tengan una aversión al riesgo muy grande, actualmente debido a la falta de liquidez en los mercados, los tipos de interés se han puesto a un nivel interesante, principalmente en Europa (para los que tengan liquidez, claro).

Para los residentes en España, la opción más segura son las letras del tesoro a 6 meses.

Actualmente dan una rentabilidad segura del 3,921%, aunque han estado por encima de 4% hace poco. Las "ofertas" de rentabilidad van cambiando regularmente (es una especia de subasta), así como los posibles plazos: hace unos meses era posible encontrar letras a 3 meses o menos.

En las entidades privadas dan generalmente más, dado que el riesgo de quiebra de una entidad es mayor que el riesgo de quiebra de un estado.

Por poner un par de ejemplos que conozco:

*En el plazo-e de Kutxa ofrecen un 4% a 3 meses

*En Ingdirect ofrecen un 4.5% en la cuenta naranja hasta junio. Y si intentáis sacar el dinero a la cuenta soporte, os ofrecen 5% durante 3 meses (truco que descubrí el otro día de casualidad).

Os fijáis que no hace ni un año era raro encontrar algo a más del 3% ?

Y lo que es más: en algunos sitios ofrecen más rentabilidad en los depósitos a 3 meses que los de a 6 o a 12!!! Estamos locos?

Tengo la sensación de que las entidades financieras están buscando dinero AHORA como sea, para tapar huecos. Y como no lo consiguen de la bolsa, de otros bancos, ni del banco central europeo... lo buscan de nuestros ahorros.

Pues habrá que aprovecharlo.

Er Migue Blog Análisis Financiero

Cita de la semana (2)

«En la Tierra, a lo largo de toda su existencia, han vivido un total de unos 107.000 millones de personas.»

Vía El listo que todo lo sabe

Sobre estándares y demás

Otra semana más, otra semana de viaje.

Esta vez he estado unos días, representando a mi empresa, en un comite de estandarizacion para el desarrolo de un interfaz de sensores para el automovil.

Es muy curioso e interesante el mundo de los estándares, y su proliferación en los últimos años. Cada vez es más normal ver a empresas "competencia de toda la vida" juntarse y tratando de sacar productos/servicios/interfaces en común. Hace unos años hubiera sido imposible ver como Mercedes y BMW (enemigos íntimos) se juntasen a hablar de la posibilidad de fabricar un automovil (compacto) en común.

Desde luego, desde el punto de vista del cliente final, todo lo que sea estándar suele ser bienvenido. Se estandarizan los interfaces de hardware (ej. puerto USB) para que los equipos de diferentes fabricantes se puedan comunicar unos con otros. Se estandarizan interfaces de software (ej. XML) para que la gente pueda compartir información y usarla con diferentes programas, plataformas.

Para los que venden los sistemas, las ventajas de la estandarización son una mayor disponibilidad de dispositivos compatibles entre si, mayor disponibilidad de "materia prima" (componentes) y (normalmente) una reducción de costes. La reducción de costes no suele ser inmediata, sino normalmente debida al aumento de volumen de producción (si se produce). De hecho, en las fases iniciales de estandarización los costes de producción suelen ser más altos porque incluyen un overhead o adaptación extra sobre el sistema optimizado que teniamos antes.

Curiosamente, para el proveedor de equipamiento y servicios, normalmente suele ser más más interesante "no estandarizar demasiado". Si todos los productos son "iguales", al final el cliente final sólo va a decidir en funcion de costes/precio y eso puede no interesar siempre (dependiendo cuáles sean las ventajas competitivas de la empresa). Es mucho mejor tener alguna característica distinctiva que te diferencie de (de manera positiva, se entiende) y poder pedir por ese producto un mayor precio (y normalmente tener un mayor margen beneficio). O mejor aun, que tu sistema se convierta en un estándar de facto, y por tanto el resto de las empresas te tengan que pagar royalties por el uso de ese sistema.

Y ahi suele estar muchas veces el truco. No se puede estar totalmente fuera del estándar porque en ese caso te puede dejar fácilmente fuera del mercado. Pero estandarizar demasiado, si uno no tiene un clara ventaja competitiva a nivel de costes, también te puede dejar fuera.

Y para añadir más comlpejidad a la ecuación, hay que tener en cuenta muchos más factores como: ¿que información se comparte con tus competidores y cual no? ¿Realmente nos interesa cooperar y hasta que nivel? ¿Cómo se armonizan los diferentes requerimientos legales / patentes? ¿Deben ser los proveedores los que tiren del carro de la estandarizacion o los clientes?

Pero mejor esto lo dejo para otros posts.